“En la abigarrada geografía americana en donde proliferan las vergonzosas dictaduras militares y los regímenes civiles y democráticos son la excepción , hay la permanente lucha de la clase obrera y campesina, de los intelectuales, universitarios, de la iglesia progresista que se traduce en lucha clandestina, urbana y rural, o en abierta guerrilla en contra de esas tiranías. En aquellos países, en donde la lucha contra la represión policial constituye una actividad cotidiana de las fuerzas progresistas y democráticas, el teatro se ha convertido en un arma poderosa. Por su capacidad de síntesis, el lenguaje teatral puede condensar situaciones, pensamientos….aclarar posiciones, enseñar…”
Estas palabras, escritas por Domingo Pigá, chileno, profesor titular de la cátedra de Filosofía del Teatro y jefe del Departamento de Teatro de la Universidad de Chile en 1972, sirven para dejar en claro la necesidad y la pertinencia de la tesis de licenciatura de Lucia Andrea Morett y el porqué de esa búsqueda de campo que pretendió llevar a cabo y que le fue coartada con el saldo adicional de la muerte de sus cuatro compañeros de pensamiento y hermanos de vida.
Pero Lucia , más allá de esa tesis que constituye la culminación de su trabajo académico, es una profesional del teatro que decidió el camino de su vida desde muy temprana edad. Posiblemente no ese día en el que-- aún siendo niña-- tuvo la fortuna de ver sobre un escenario el montaje de la obra teatral “Guadalupe, años sin cuenta” del grupo teatral “La Candelaria” de Colombia, sino tal vez en aquella ocasión en que contando con siete años tuvo por vez primera la oportunidad de pisar un escenario teatral para recitar un pequeño poema titulado “Breve biografía de un niño vietnamita” del poeta cubano Jesús Cos Cause. Fue entonces víctima de la magia del teatro y aun cuando ese es un lugar común (muchos actores podrán quizá narrar la misma historia) tiene en la persona de Lucia un sentido especial ya que, a lo largo de su vida y hasta llegar al día de la cita con su vida profesional ella fue creciendo no solo en su deseo de ser alguien dentro del teatro sino en su conciencia social y política hasta hacer confluir ambas cuestiones en esa decisión crucial para su futuro.
Lucia Morett es actriz, no porque así pueda llamarse a cualquier persona que decida hacer teatro, sino porque se preparó para ello. La Licenciatura en Literatura Dramática y Teatro ofrecía, a la fecha en que Lucia decide estudiar dicha carrera (2000), tres opciones de especialización. Dirección, Dramaturgia y Actuación. Ella decide esta última porque desea tener una voz que se escuche, porque habla fuerte y claro y sabe que desde el escenario se puede dar la batalla hacia un mundo mejor. Al menos esa es su visión, en sentido contrario tal vez al anhelo tan común entre quienes buscan ser actores o actrices para alcanzar la fama y ganar buen dinero, para salir en la televisión o hacer cine y ser parte de un mundo mágico y luminoso enmarcado por decenas de reflectores de mil watts cada uno. Lucia…Andrea, tiene certezas, sabe lo que quiere y dónde encontrarlo. Habita los escenarios siempre con la intención de decir algo, le importa sobremanera lo que se dice, el que la obra de teatro en la cual participa lleve un mensaje. Es así como, cursando apenas el segundo año de la licenciatura ella decide integrarse a la llamada Compañía Teatral Luz Negra, una tribu bastante bizarra y dispar conformada por veinte entes teatrales de lo más heterogéneos que se dan a la tarea de contar en el escenario la historia de Sacco y Vanzetti, dos inmigrantes italianos de ideología anarquista condenados a muerte en los Estados Unidos por un crimen que no cometieron en el año de 1927. Ella representa el personaje de Luisa Vanzetti, hermana de Bartolomé Vanzetti. Su trabajo resulta, a pesar de tratarse de una actriz en formación, impecable. La experiencia dura más de tres años (2001-2004).
Mi nombre es el mismo Lucia, y tuve la oportunidad de verte trabajar en el Centro Cultural La Pirámide un domingo por la tarde, con el teatro casi vacío. (1)
Habíamos ocho, diez personas si acaso. Recuerdo todo como si lo hubiese vivido ayer porque la obra me calo lo suficiente como para dejarme una herida permanente, como las que posiblemente tu tengas ahora después de haber sobrevivido.
Agradezco esta nota aparecida en Milenio porque muy poco se ha dicho de ti como gente que hace teatro.
Creo en ti porque tuve la fortuna de verte sobre el escenario y creo que es una lástima que toda la discusión que se ha dado en torno tuyo se de en relación a lo político y nadie habla de ti como artista.
Es como si tuvieran miedo de entrar en tus terrenos
Creo que todo verdadero artista es en esencia un animal político y ustedes, quienes nos mostraron su verdadero rostro esa tarde de domingo evidentemente lo son.
Asistí a esa función acompañada de mi hijo adolescente (16 años) y recuerdo, cuando íbamos de vuelta a casa a bordo del metro como él iba llorando en silencio
Fue la primera vez que le vi llorar.
Un saludo desde el corazón Lucia.
Comment by lucia — March 13, 2009 @ 8:10 pm
Yo no tuve la oportunidad de verte actuar sobre un escenario, pero algo (quizá sea tan solo la influencia de los medios) me ha hecho voltear hacia ti.
Saber que, como se dice en otros articulos de este mismo blog, eres una sobreviviente, imaginar lo que viviste en ese lugar el primero de marzo del año anterior, imaginar el sentimiento que guarda tu interior después de lo que has tenido que soportar, porque sobrevivir es algo para celebrar y sin embargo no debe ser nada fácil de sobrellevar, me llevan a tratar de entenderte de otra manera que en nada se parece a lo que se dice de ti en los medios.
Haces teatro, hablas de teatro, he visto tu rostro y he escuchado tu voz en algunos videos que alguien ha subido a la red, luego entonces no entiendo mucho de lo que de ti se dice, no entiendo tantos de los ataques que se te hacen, y sin embargo no me importa. Trato de buscarte en la informacion alternativa y te encuentro aquí hablando de teatro y siempre he pensado que el teatro es mágico y que, como dice el comentario anterior, nadie habla de ti de esa manera.
Yo estudio artes plasticas por la Universidad de Guanajuato y conozco a la gente que sale en uno de los videos. Los vi actuar cuando era niña en uno de los Cervantinos que como habitante de esta ciudad (Guanajuato) me ha tocado padecer y disfrutar. No se si el mundo es muy pequeño pero si se que las cosas no pasan porque si.
No sé mucho de movimientos sociales, desde niña he vivido lejos de la realidad de las grandes urbes y de las historias que conforman nuestro entorno, sin embargo siento una identificación contigo que tal vez tenga que ver con el hecho de que tu tambien eres una artista.
Espero tener la oportunidad de conocerte personalmente algun día y te deseo lo mejor.
Alicia
Comment by Alicia Martinez — March 25, 2009 @ 8:19 pm